"Estoy en casa en el universo"
La nueva energía del planeta es el amor. Dedico un rato cada día a abrir mi mente y mi corazón para sentirme unido al resto de la humanidad. Dondequiera que haya nacido o crecido, independientemente de cuál sea el color de mi piel o de la religión que me inculcaron en la infancia, todo y todo el mundo estamos conectados al Poder Único, y a través de él todas nuestras necesidades son satisfechas.
Mantengo una comunicación cálida, afectuosa y abierta con todos los miembros de mi familia terrenal. Con aquellos que ven la vida de una manera tan distinta, con los más jóvenes, los más ancianos, los gais, los heterosexuales, los de distinto color de piel. Soy miembro de la comunidad de la Tierra. Las diferencias de opinión son maravillosas, constituyen unas variopintas diversidades de expresión, y no motivos para escoger un bando o declarar una guerra. Cuando abandono cualquier prejuicio, el planeta entero es bendecido.
Hoy mi corazón se abre un poco más al emprender el trabajo de crear un mundo donde es seguro amarnos los unos a los otros.
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