"En cada relación hay una lección que aprender y un regalo que recibir"
Creo que elegiste a tus padres antes de nacer para aprender lecciones valiosas. Tu Yo Superior sabe las experiencias que necesitas para progresar en tu camino espiritual. De modo que, sea cual sea el trabajo que has venido a hacer con tus padres, llévalo a cabo. Al margen de lo que te digan o te hagan, o de lo que te dijeron o te hicieron, estás aquí, en el fondo, para amarte.
Si tienes hijos, deja que se amen a sí mismos al darles el espacio para que se puedan expresar libremente de formas positivas y beneficiosas. No olvides que, al igual que tú elegiste a tus padres, tus hijos te han elegido a ti. Hay unas lecciones importantes para todos con las que debemos trabajar.
A los padres que se aman a sí mismos les resulta más fácil enseñarles a sus hijos a amarse. Cuando nos sentimos a gusto en nuestra piel, les enseñamos con el ejemplo a nuestros hijos a valorarse. Cuanto más procuramos amarnos a nosotros mismos, más ven nuestros hijos que es bueno hacerlo.
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